miércoles, abril 23, 2025

«Para que la guerra sepa que estoy aquí», de Yahya Ashour

Traducción de Juan Carlos Villavicencio




Hay más fantasmas mirándome en mi cuarto
mientras cae cerca otro misil.

Estoy acostado en mi cama
sin pensar en cosas triviales como dormir,
pensando que el próximo seré yo.

En una habitación oculta para el Este o el Oeste,
cerré la puerta para que mi casa no se vea,
cierro los ojos para no ver mi propia habitación,
y dejo abierta la ventana de par en par
para que la guerra sepa que estoy aquí.

Con cada misil que explota cerca,
intento congregar a toda la casa en mis brazos.
El alma del hogar casi surge de bajo la tierra.
Mi espíritu apenas retorna al lenguaje,
mientras ambos seguimos temblando.

Me duele el estómago como si me tragara un tanque,
mi cabeza explota como si me hubiera golpeado un misil.
Mis huesos bebieron toda la sangre de mi cuerpo,
y me estrangula la ansiedad.

Sobrevivo a la muerte,
pero no es que vuelva a vivir.
Canto, rezo por mis heridas,
y espero que algún día ellas me lleven al cielo.














No hay comentarios.: