Versión de Juan Carlos Villavicencio
Tan pintoresca que es la tierra a orillas del río
con tintes otoñales purificando el paisaje.
Sin descanso, olas verdes se funden con el cielo azul.
Tras la lluvia los rayos del sol adquieren tintes fríos.
La cerca de bambú se ve apenas a través de las cañas,
y cabañas con techo de paja cubiertas de maleza.
Entre las nubes blancas se pierden las velas blancas,
y donde el humo se enrosca lento,
ahí los vapores de la tienda de vinos flotan a baja altura.
¡Cuántas historias de leñadores y pescadores
se han contado sobre el ascenso y el declive de las Seis dinastías!
Entristecido, me apoyo en el barandal de la torre
y en silencio el sol se torna frío y se hunde en los cielos del oeste.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario