Veinticuatro años recuerdan las lágrimas de mis ojos
(Entierren a los muertos para que no caminen hacia la tumba
como parturientas).
En la arista de la puerta natural me acurruqué como un sastre
cosiendo la mortaja para un viaje
bajo la luz de un sol devorador de carne.
Vestido para morir, el balanceo sensual comenzó,
las venas rojas llenas de dinero,
en dirección final de un pueblo elemental
avanzo mientras lo eterno exista.
en The map of love, 1939
Traducción de Marina Kohon
No hay comentarios.:
Publicar un comentario