domingo, diciembre 30, 2007

“Los borrachos”, de Malcolm Lowry





El ruido de la muerte aquí en este bar desolado,
Donde la tranquilidad se sienta encorvada sobre su oración
Y la música sirve de coraza al sueño del amante,
Pero cuando ninguna moneda introduce esta dura desesperación
Hasta aquí, el más solitario de los hogares
Y de todos los destinos el más solitario además,
Cuando ninguna música eléctrica rompe el batir
De corazones doblemente rotos pero ahora reunidos
Por el cirujano de paz en la astilla del desastre,
Penetra más profundamente que lo hicieran las trompetas
El movimiento de la mente dentro de ese entramado
Donde los desórdenes son simples como la tumba
Y la araña de la vida se asienta y duerme.









3 comentarios:

Anónimo dijo...

Para qué vamos a relacionar la hora del post con el título del poema..

dscntxt-3 dijo...

jajaja...

anais dijo...

Muy bonito.
Siempre es un placer volver a leerlos.

Que la magia y el fuego del dragón guien sus pasos durante este 2008 que llega.

Para ver el dragón, visiten http://www.fotolog.com/palermo_atrevido/35166257
el Flog de Atrevidos por Costumbre, el Murgón de Palermo.