viernes, agosto 29, 2008

"La sangre en el jardín", de Ramón Gómez de la Serna







El crimen aquel hubiera quedado envuelto en el secreto durante mucho tiempo si no hubiera sido por la fuente central del jardín, que, después de realizado el asesinato, comenzó a echar agua muerta y sangrienta.

La correspondencia entre el disimulado crimen de dentro del palacio y la veta de agua rojiza sobre la taza repodrida de verbosidades, dio toda la clave de lo sucedido.





1933










1 comentario:

Unknown dijo...

Siempre me pregunte si era una metáfora o un hecho sólido,es decir salió sangre de la fuente? entonces donde sea que ocurrio el crimen llego a mezclar sangre y agua? o verlo de un sentido paranormal?.....:v??????