Mientras Israel retiraba tanques y blindados del norte de la franja de Gaza, tras una ofensiva de seis días que dejó 116 palestinos muertos y en la que el movimiento Hamás se considera vencedor, el representante del Partido del Pueblo Palestino para América Latina y el Caribe, Khaled Salama, visitaba nuestro país para entregar más antecedentes sobre la real situación.
Tras la incursión de las tropas israelíes, más de un centenar de palestinos murieron (cerca de la mitad civiles) y 350 resultaron heridos en los constantes ataques aéreos y terrestres lanzados por Israel desde el miércoles contra viviendas y edificios del movimiento islamista Hamás.
El diplomático palestino Khaled Salama se reunió este viernes con la dirección del Partido Comunista de Chile, integrada en la oportunidad por Juan Andrés Lagos y Óscar Azócar, de la comisión política, para intercambiar experiencias sobre la lucha y las tareas de solidaridad pendientes entre ambos partidos y pueblos.
Salama nació en Ramallah, ciudad palestina de 57.000 habitantes en Cisjordania, 15 kilómetros al noroeste de Jerusalén. Como el resto de Cisjordania, Ramallah estuvo bajo ocupación jordana desde la guerra árabe-israelí de 1948 hasta la guerra de los Seis Días de 1967 en que fue ocupada por tropas israelíes, como el resto del territorio al oeste del Jordán. En 1994, la ciudad fue entregada a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) dentro de los Acuerdos de Oslo, firmados en 1993, y es administrada por ésta.
Ramala es famosa por la Mukata, que actualmente funciona como sede del Gobierno de la ANP. La ANP pretende que la futura capital de la Palestina independiente sea Jerusalén Este, actualmente bajo administración israelí. En Ramala se encuentra actualmente la oficina del presidente de la ANP Mahmoud Abbas.
Reforzar la solidaridad
Khaled Salama llamó la atención sobre la necesidad de reforzar la solidaridad con la lucha de los palestinos contra la agresión israelí en complicidad con el imperialismo norteamericano. Salama afirmó que los partidos y movimientos de izquierda en Palestina luchan por la conformación de un estado democrático donde sea posible la convivencia entre islamistas, judíos, cristianos y ciudadanos sin creencias religiosas: “Así como se reconoció el derecho a la conformación de Israel como una nación, debe garantizarse la creación del estado Palestino según las resoluciones de la Organización de Nacional Unidas y del Consejo de Seguridad de la ONU que son desconocidas por el estado israelí y por los Estados Unidos”.
El representante palestino destacó que la “guerra civil” que publicitan los medios de comunicación transnacionales es de interés de las empresas extranjeras y del imperialismo porque los palestinos sólo quieren “la unidad, la democracia y el desarrollo de su nación en paz y libertad”. El dirigente indicó que el sionismo internacional pretende instaurar un estado confesional, religioso y fundamentalista hebreo en la región. Y transferir a los palestinos hacia el sur para apoderarse, también, de la costa palestina y sus riquezas naturales. Salama señaló: “En cualquier estado contemporáneo coexisten sin problemas ciudadanos de diferentes religiones, razas e ideologías y nos parece que el pueblo palestino tiene derecho a ello. Estamos más allá de los fundamentalismos, de la violencia y el terrorismo”.
“En Israel, por otra parte, las odiosidades se dan incluso entre los propios judíos, provenientes de Europa –de Polonia y otros países- contra los sefaradíes, que son considerados ciudadanos de segunda clase y los originarios de América Latina, que son de tercera o cuarta clase”. Explicó además que mientras la región tenía apenas 12 mil judíos en el 1,6% del territorio a comienzos del siglo XX, los palestinos vivían en la zona desde los tiempos bíblicos: “Los palestinos nunca se han retirado de sus territorios ancestrales, incluida la Cisjordania y la franja de Gaza, arrebatadas por la violencia sionista. Actualmente los israelíes ocupan el 60% de las tierras y están utilizando armas prohibidas internacionalmente, como bombas implosivas contra la población inocentes y desarmada, además de levantar un muro, que en mucho recuerda la metodología nazi, para aislar a los palestinos de la población judía, aunque muchos de los primeros son también ciudadanos del estado de Israel, desplazados por la fuerza de ese territorio”.
“El interés del imperialismo por la zona está centrado en el petróleo, el gas y el mercado porque Palestina está enclavada estratégicamente entre Asia, Africa y Europa por eso el interés norteamericano –como hizo con Irak- para apoderarse del petróleo. Nuestro pueblo ha llevado a cabo una serie de “intifadas” contra los sionistas y también contra algunos títeres de los norteamericanos en el mundo árabe que hicieron abortar la revolución palestina”. Respecto a las últimas “conversaciones de paz” en Madrid, Oslo y otras ciudades, Khaled Salama planteó: “Ellos cada día piden más y más y últimamente quieren que los palestinos acepten una indemnización para instaurar definitivamente en la región un estado judío confesional, anulando las resoluciones de la ONU. Israel no quiere aceptar ninguna de las 400 resoluciones de la Asamblea General ni las 189 del Consejo de Seguridad mientras que Estados Unidos sigue votando con ellos, junto a otros dos ó 3 países, contra estos acuerdos de paz. Otros 180 países se pronuncian a favor del estado palestino”.
El Partido del Pueblo Palestino convive con otros cinco partidos o movimientos de izquierda en busca de la unidad política, incluida la convivencia religiosa, explicó Salama. El dirigente palestino denuncia que la CIA y el Mossad (agencia de inteligencia israelí) complotan permanentemente contra la causa palestina y los responsabilizó, por ejemplo, de los atentados contra la AMIA y la embajada de Israel en Buenos Aires, así como del atentado que le costó la vida al ex primer ministro Isaac Rabin “que no fue muerto por un palestino”. Asimismo, recordó que Osama Bin Laden era un agencia de la CIA que tenía negocios con los norteamericanos y “resulta demasiado curioso que no lo ubiquen, supuestamente escondido en una cueva en Pakistán, cuando perfectamente podría encontrarse hoy día en Washington”.
Pese al desequilibrio de fuerzas y bajas, el movimiento Hamás se ve como ganador de la reciente batalla, en la que decenas de milicianos hicieron frente a los soldados israelíes. "Gaza será siempre la tumba de las fuerzas de la ocupación", indicó uno de sus dirigentes, Sami abu Zuhri.
Salama recuerda que lamentablemente el movimiento Hamas fue el autor del golpe de estado contra el gobierno de Al Fatah y hasta ahora no hay un acuerdo político para superar la crisis de gobierno en la Autoridad Nacional Palestina. El movimiento islamista convocó para la presente jornada manifestaciones populares en Gaza para "celebrar la derrota del Ejército de ocupación israelí", mientras que su rival Al Fatah ha protestado en la ciudad de Gaza contra la ofensiva. El primer ministro israelí, Ehud Olmert, advirtió el domingo que los ataques aéreos y terrestres sobre la franja no se detendrán "ni un segundo" pese a las críticas internacionales. “Esto es lo más grave, lo que hay que detener y denunciar”, aclaró en Chile Khaled Salama.
El Partido del Pueblo Palestino celebra este fin de semana un Congreso Nacional al que ha sido invitado el PCCH que enviará un mensaje de saludo a la colectividad hermana y a través de ella, a todo el pueblo palestino.
Tras la incursión de las tropas israelíes, más de un centenar de palestinos murieron (cerca de la mitad civiles) y 350 resultaron heridos en los constantes ataques aéreos y terrestres lanzados por Israel desde el miércoles contra viviendas y edificios del movimiento islamista Hamás.
El diplomático palestino Khaled Salama se reunió este viernes con la dirección del Partido Comunista de Chile, integrada en la oportunidad por Juan Andrés Lagos y Óscar Azócar, de la comisión política, para intercambiar experiencias sobre la lucha y las tareas de solidaridad pendientes entre ambos partidos y pueblos.
Salama nació en Ramallah, ciudad palestina de 57.000 habitantes en Cisjordania, 15 kilómetros al noroeste de Jerusalén. Como el resto de Cisjordania, Ramallah estuvo bajo ocupación jordana desde la guerra árabe-israelí de 1948 hasta la guerra de los Seis Días de 1967 en que fue ocupada por tropas israelíes, como el resto del territorio al oeste del Jordán. En 1994, la ciudad fue entregada a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) dentro de los Acuerdos de Oslo, firmados en 1993, y es administrada por ésta.
Ramala es famosa por la Mukata, que actualmente funciona como sede del Gobierno de la ANP. La ANP pretende que la futura capital de la Palestina independiente sea Jerusalén Este, actualmente bajo administración israelí. En Ramala se encuentra actualmente la oficina del presidente de la ANP Mahmoud Abbas.
Reforzar la solidaridad
Khaled Salama llamó la atención sobre la necesidad de reforzar la solidaridad con la lucha de los palestinos contra la agresión israelí en complicidad con el imperialismo norteamericano. Salama afirmó que los partidos y movimientos de izquierda en Palestina luchan por la conformación de un estado democrático donde sea posible la convivencia entre islamistas, judíos, cristianos y ciudadanos sin creencias religiosas: “Así como se reconoció el derecho a la conformación de Israel como una nación, debe garantizarse la creación del estado Palestino según las resoluciones de la Organización de Nacional Unidas y del Consejo de Seguridad de la ONU que son desconocidas por el estado israelí y por los Estados Unidos”.
El representante palestino destacó que la “guerra civil” que publicitan los medios de comunicación transnacionales es de interés de las empresas extranjeras y del imperialismo porque los palestinos sólo quieren “la unidad, la democracia y el desarrollo de su nación en paz y libertad”. El dirigente indicó que el sionismo internacional pretende instaurar un estado confesional, religioso y fundamentalista hebreo en la región. Y transferir a los palestinos hacia el sur para apoderarse, también, de la costa palestina y sus riquezas naturales. Salama señaló: “En cualquier estado contemporáneo coexisten sin problemas ciudadanos de diferentes religiones, razas e ideologías y nos parece que el pueblo palestino tiene derecho a ello. Estamos más allá de los fundamentalismos, de la violencia y el terrorismo”.
“En Israel, por otra parte, las odiosidades se dan incluso entre los propios judíos, provenientes de Europa –de Polonia y otros países- contra los sefaradíes, que son considerados ciudadanos de segunda clase y los originarios de América Latina, que son de tercera o cuarta clase”. Explicó además que mientras la región tenía apenas 12 mil judíos en el 1,6% del territorio a comienzos del siglo XX, los palestinos vivían en la zona desde los tiempos bíblicos: “Los palestinos nunca se han retirado de sus territorios ancestrales, incluida la Cisjordania y la franja de Gaza, arrebatadas por la violencia sionista. Actualmente los israelíes ocupan el 60% de las tierras y están utilizando armas prohibidas internacionalmente, como bombas implosivas contra la población inocentes y desarmada, además de levantar un muro, que en mucho recuerda la metodología nazi, para aislar a los palestinos de la población judía, aunque muchos de los primeros son también ciudadanos del estado de Israel, desplazados por la fuerza de ese territorio”.
“El interés del imperialismo por la zona está centrado en el petróleo, el gas y el mercado porque Palestina está enclavada estratégicamente entre Asia, Africa y Europa por eso el interés norteamericano –como hizo con Irak- para apoderarse del petróleo. Nuestro pueblo ha llevado a cabo una serie de “intifadas” contra los sionistas y también contra algunos títeres de los norteamericanos en el mundo árabe que hicieron abortar la revolución palestina”. Respecto a las últimas “conversaciones de paz” en Madrid, Oslo y otras ciudades, Khaled Salama planteó: “Ellos cada día piden más y más y últimamente quieren que los palestinos acepten una indemnización para instaurar definitivamente en la región un estado judío confesional, anulando las resoluciones de la ONU. Israel no quiere aceptar ninguna de las 400 resoluciones de la Asamblea General ni las 189 del Consejo de Seguridad mientras que Estados Unidos sigue votando con ellos, junto a otros dos ó 3 países, contra estos acuerdos de paz. Otros 180 países se pronuncian a favor del estado palestino”.
El Partido del Pueblo Palestino convive con otros cinco partidos o movimientos de izquierda en busca de la unidad política, incluida la convivencia religiosa, explicó Salama. El dirigente palestino denuncia que la CIA y el Mossad (agencia de inteligencia israelí) complotan permanentemente contra la causa palestina y los responsabilizó, por ejemplo, de los atentados contra la AMIA y la embajada de Israel en Buenos Aires, así como del atentado que le costó la vida al ex primer ministro Isaac Rabin “que no fue muerto por un palestino”. Asimismo, recordó que Osama Bin Laden era un agencia de la CIA que tenía negocios con los norteamericanos y “resulta demasiado curioso que no lo ubiquen, supuestamente escondido en una cueva en Pakistán, cuando perfectamente podría encontrarse hoy día en Washington”.
Pese al desequilibrio de fuerzas y bajas, el movimiento Hamás se ve como ganador de la reciente batalla, en la que decenas de milicianos hicieron frente a los soldados israelíes. "Gaza será siempre la tumba de las fuerzas de la ocupación", indicó uno de sus dirigentes, Sami abu Zuhri.
Salama recuerda que lamentablemente el movimiento Hamas fue el autor del golpe de estado contra el gobierno de Al Fatah y hasta ahora no hay un acuerdo político para superar la crisis de gobierno en la Autoridad Nacional Palestina. El movimiento islamista convocó para la presente jornada manifestaciones populares en Gaza para "celebrar la derrota del Ejército de ocupación israelí", mientras que su rival Al Fatah ha protestado en la ciudad de Gaza contra la ofensiva. El primer ministro israelí, Ehud Olmert, advirtió el domingo que los ataques aéreos y terrestres sobre la franja no se detendrán "ni un segundo" pese a las críticas internacionales. “Esto es lo más grave, lo que hay que detener y denunciar”, aclaró en Chile Khaled Salama.
El Partido del Pueblo Palestino celebra este fin de semana un Congreso Nacional al que ha sido invitado el PCCH que enviará un mensaje de saludo a la colectividad hermana y a través de ella, a todo el pueblo palestino.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario