domingo, enero 28, 2007

«Angustia», de Stéphane Mallarmé

Traducción de Juan Carlos Villavicencio





No vengo esta noche a vencer tu cuerpo, oh bestia
en quien van los pecados de un pueblo, ni a cavar
en tus cabellos impuros una triste tempestad
bajo el incurable hastío que derrama mi beso:

Pido a tu lecho el pesado dormir sin sueños
que se cierne bajo las desconocidas cortinas del remordimiento
y que puedes degustar tras tus negras mentiras,
tú que de la nada sabes más que los muertos.

Pues el Vicio, al roer mi nativa nobleza,
me ha marcado como a ti con su esterilidad,
pero mientras tu seno de piedra está habitado

por un corazón al que el diente de ningún crimen hiere
yo huyo, pálido, derrotado, obsesionado por mi sudario
con miedo a morir cuando me acuesto solo.






Retrato de Mallarmé por Paul Gauguin











ANGOISSE
(Tournon, febrero 1864.)

Es bajo el título «A une putain» («A una puta») que se encuentra este soneto en un manuscrito sin fecha en la Biblioteca Jacques Doucet, como también en un texto casi idéntico en el Manuscrit Aubanel. Es bajo este título que lo conocieron primeramente los amigos del autor. En marzo 1864, Henri Cazalis le escribía:

«Si no hubiera prestado tus versos a Armand Renaud, quien me ha suplicado dejárselos por un tiempo, hoy te hablaría mucho de ellos. Ellos merecen una larga, una muy larga discusión, que la reservo para mi próxima carta. Los versos a una puta son, creo yo, unos sin falta: hay un verso sublime: Toi qui sur le néant en sois plus que les morts (Tú que sobre la nada sabes más que los muertos); hay quizás otros, pero no me acuerdo sino de ése».

El 15 de abril 1864, Eugène Lefébure le escribía:
«Lo que me golpea más en sus versos retumbantes y sombríos, es una singular potencia de concentración. Es probable que las causas se remonten muy lejos en su vida y que ellas hayan ido a parar como corolario al spleen que hace su fuerza como poeta y su dolor como hombre… Pienso sobre todo en su soneto a una puta, una verdadera obra maestra que contiene un pozo de dolor».

El soneto apareció en el Parnasse Contemporain (del 12 mayo 1866) bajo el título «A celle qui est tranquille» («A la que es tranquila»), en evidente imitación de «A celle qui est trop gaie» («A la que es demasiado alegre») de Baudelaire, como debió también serlo, en otra entrega del Parnasse Contemporain, el título de E. des Essarts, «A celle qui est trop loin» («A la que está demasiado lejos»).

El soneto de Mallarmé reapareció, bajo el mismo título, veinte años más tarde, en la Basoche de septiembre 1885.

En seguida, para «desbaudelairizar» sus obras, Mallarmé renunció a este título y lo sustituyó por el de «Angoisse» («Angustia»), bajo el cual figura este soneto en la edición de Poésies (Revue Indépendante, 1887) y en las ediciones siguientes. Es de notar que en el Parnasse Contemporain de 1866 figura bajo este título un soneto de Verlaine, que titulado «l’Angoisse», toma lugar, el año siguiente, en la colección de Poëmes Saturniens. Es el poema que empieza como Nature, rien de toi ne m’emeut, ni les champs… (Naturaleza, nada tuyo me conmueve, ni los campos…)


Extraído de Mallarmé: Œuvres complètes, «Notes et Variantes», 
Bibliothèque de la Pléiade, Gallimard, 1945 (reimp. 1984.), p. 1426.





Traducción de esta nota a cargo de Miguel Muñoz





















2 comentarios:

Javier Galarza dijo...

siempre recuerdo dos magníficas ironías del maestro mallarmé: "que haya algo de humo entre el mundo" y yo" y "soy incompetente en cualquier materia que no sea el infinito"

koka dijo...

poetas malditos...cómo me embriagan sus delirios...cómo me extasía el flujo de sus palabras...
ya más este poema..uno de mis faoritos de mallarme

un saludo oficial a todos los poetas ineditos