«Saludando a los supersónicos», de Wislawa Szymborska

Versión de Juan Carlos Villavicencio

 

Más rápido que el sonido hoy,

más rápido que la luz mañana,

convertiremos el sonido en Tortuga

y a la luz en Liebre.

Dos venerables criaturas 

de la antigua parábola,

desde tiempos pasados un par noble

compitiendo de manera justa y franca.

Corriste tantas veces

a través de esta humilde tierra;

ahora intenta tomar otro curso,

a través del azul arriba en el cielo.

La pista es toda tuya. No nos vamos

a interponer en tu camino: para entonces

habremos salido a perseguirnos 

a nosotros mismos en lugar de a ti.

en MAP (Collected and last poems), 2015