Versión de Juan Carlos Villavicencio / del Emperador Ch'ien Wen-Ti (s. VI)
Sin duda la ciudad de Lo-Yang es un lugar hermoso:
Las amplias calles están cubiertas de luz primaveral.
Los jóvenes pasean con arpas en sus manos:
Las muchachas salen a los campos con sus cestas a buscar moras.
Dorados rebenques brillan al costado del caballo,
Sus mangas de gasa rozan las ramas verdes.
Los carruajes vuelven a casa al amanecer,
y las muchachas con sus cestas llenas de fruta, también.
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