El
destructor que ha humillado la vida
sueña
que muere de un tiro y despierta.
En
el territorio de los sueños
noche
tras noche
lo
espera un puma detrás del bosque
de la piedra de la montaña.
Soles
y lunas pasan y siempre lo sigue
sin
dejarse ver jamás
sin
claudicar ni un instante.
Para
saber el camino que recorre
el
hogar que habita
las
horas que ocupa para el sueño y el trabajo.
Y
entonces despierta el puma también de su sueño
con
el puño y los dientes apretados
en
el cuerpo de un joven guerrero.
Decide
que ha llegado el tiempo de sepultar la espera.
en Weichapeyuchi ül: cantos de guerrero, 2012
Antología de poesía
política mapuche
1 comentario:
https://youtu.be/gw6U_97cug0
Publicar un comentario