El amanecer limpio entra en el antiguo templo,
El sol temprano da brillo al alto bosque.
Senderos sinuosos penetran los oscuros
lugares,
Mi sala de meditación: espesos árboles
floridos.
La luz de la montaña alegra la naturaleza
de los pájaros,
Mientras las sombras de la laguna
Vacían el corazón de los hombres.
Los diez mil ruidos en este lugar se
silencian,
Sólo permanece el sonido de las campanas de
piedra.
en Poesía clásica
china, 2001
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