Je soutenais l'eclait de la mort toute pure.
P. Valery
Alguna vez me angustia una certeza,
Y ante mí se estremece mi futuro.
Acechándolo está de pronto un muro
Del arrabal final en que tropieza.
La luz del campo. ¡Mas habrá tristeza
Si la desnuda el sol! No, no hay apuro
Todavía. Lo urgente es el maduro
Fruto. La mano ya le descorteza.
...Y un día entre los días el más triste
Será. Tenderse deberá la mano
Sin afán. Y acatando el inminente
Poder diré sin lágrimas: embiste,
Justa fatalidad. El muro cano
Va a imponerse su ley, no su accidente.
en Poemas, 1979
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