jueves, julio 31, 2008

"Ensayo sobre el principio de la población", de Thomas Malthus

Fragmentos



“La naturaleza es tan fecunda, que cualquier intento imprudente de aliviar la pobreza provocará incrementos insostenibles en la población, exacerbando el sufrimiento que se procura evitar. Hasta donde yo sé, la naturaleza no puede ser mejorada. Es por ello que los reformadores sociales deberían permitir que los acontecimientos sigan su curso inevitable y dejar que las guerras, las enfermedades y el hambre eliminen el excedente”.

“En vez de recomendarles limpieza a los pobres, hemos de aconsejarles lo contrario, haremos más estrechas las calles, meteremos más gente en las casas y trataremos de provocar la reaparición de alguna epidemia”.

“Los vicios de la humanidad actúan como hábiles y activos pastores de la despoblación. Forman la avanzada del vasto ejército de la destrucción y, con frecuencia, ellos solos consiguen rematar la espantosa obra. Pero si llegaran a fallar en esta guerra de exterminio, detrás de ellos, en una terrible formación de batalla, siguen las malas cosechas, las epidemias, la peste y las plagas, para arrasar con miles, decenas de miles. Si aun así la victoria se resistiera, la hambruna, gigantesca e inevitable, acecha en la retaguardia, y con un solo golpe poderoso nivela la población y los alimentos del mundo”.

“Considerando aceptados mis postulados, afirmo que la capacidad de crecimiento de la población es infinitamente mayor que la capacidad de la tierra para producir alimentos para el hombre.

La Población, si no encuentra obstáculos, aumenta en progresión geométrica. Los alimentos tan sólo aumentan en progresión aritmética. Basta con poseer las más elementales nociones de números para poder apreciar la inmensa diferencia a favor de la primera de estas dos fuerzas.

No veo manera por la que el hombre pueda eludir el peso de esta ley, que abarca y penetra toda la naturaleza animada. Ninguna pretendida igualdad, ninguna reglamentación agraria, por radical que sea, podrá eliminar, durante un siglo siquiera, la presión de esta ley, que aparece, pues, como decididamente opuesta a la posible existencia de una sociedad cuyos miembros puedan todos tener una vida de reposo, felicidad y relativa holganza y no sientan ansiedad ante la dificultad de proveerse de los medios de subsistencia que necesitan ellos y sus familias.”

“La gran incógnita que debemos resolver es si, de ahora en adelante, el hombre avanzará a velocidad creciente hacia una mejora ilimitada y, hasta hoy, inimaginable, o estará condenado a oscilar perpetuamente entre la felicidad y la miseria”.






1798







Contribución parcial a Dscntxt de Germán Hitschfeld






No hay comentarios.: