jueves, agosto 09, 2007

Dos poemas de Yalal Al-Din Rumi

Traducción de Clara Janés y Ahmad Taherí





En las adoraciones y bendiciones de los hombres rectos
Las alabanzas de todos los profetas están amasadas juntas.
Todas sus alabanzas se mezclan en una corriente,
Todos los vasos se vacían en una sola jarra.
Pues Él que es alabado, de hecho, es solamente Uno,
En este sentido todas las religiones son sólo una religión.
Porque todas las alabanzas están dirigidas hacia la luz de Dios,
Sus numerosas formas y figuras están tomadas de ella.
Los hombres nunca dirigen sus alabanzas
          sino al Ser considerado digno,
Se equivocan a través de opiniones erróneas de Él.
Así, cuando una luz cae sobre un muro,
Ese muro es un eslabón en conexión entre todos sus rayos;
Sin embargo cuando arroja ese reflejo de nuevo a su fuente,
Erróneamente muestra lo grande como pequeño,
          y detiene sus alabanzas.
O si la luna se refleja en un pozo,
Y alguien está pretendiendo alabar a la luna,
Aunque, por ignorancia, mira dentro del pozo.
El objeto de sus alabanzas es la luna, no su reflejo;
Su infidelidad surge del error de las circunstancias.
Ese hombre bien intencionado está equivocado en su error;
La luna está en el cielo, y él la supone en el pozo.
Por estos falsos ídolos la humanidad está perpleja,
Y conducida por vanas codicias a su dolor.



·   ·   ·



Cuando estoy contigo, estamos despiertos toda la noche
Cuando no estas, no puedo dormir
¡Que Dios bendiga estas dos insomnias!
y la diferencia entre ellas






en Rubayat de Yallal ud-Din Rumi, 1996



















1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustaron ambos. Creo que fue Rumi el que dijo aquello de: "Nunca el amante busca sin ser buscado por su amada".
Y claro, uno se queda pensando en que habrá de cierto en su poesía...

Pd: ¿Son cosas mias o el segundo tiene cierto paralelismo con el mito de la caverna?


Saludos desde Canarias...