domingo, julio 15, 2007

“Los patanes no se suicidan ni son alcohólicos”. Entrevista a Jorge Teillier, de Elga Pérez-Laborde





¿De qué tienes miedo?
Me asusta ver que la gente es tonta. Yo soy también bastante tonto. Tengo miedo a la crueldad. ¿Lees los diarios? Ayer leí con horror cómo un hombre fabricó las circunstancias para matar a un muchacho de diecisiete años por robarle un pan de mantequilla. Una especie de Marqués de Sade... ¿Has leído al Marqués? Uno está a merced de gente desatinada y uno mismo a su vez obra de verdugo ...

¿Te cuesta menos escribir que hablar?
Me cuesta mucho escribir, porque es un proceso de desdoblamiento... Tú dirás que nadie me obliga, pero me sentiría muerto si dejara de escribir, es como privarse de los sueños... El psiquiatra te los quita.

¿Qué sueñas?
¿Tú me los quieres quitar?

No, sólo quiero saber tus inquietudes, tus motivaciones, tus dolores.
Soy alcohólico. Bueno, fui alcohólico. Ya no; hace tres meses que no tomo. Tú sabes, es una enfermedad...

¿Por qué? Hablame de ti...
No me gusta tener amigos, sólo compañeros de juego. Tomo porque no tengo tiempo, el alcohol contrae el tiempo...

¿No preferirias estar lúcido?
Prefiero no estar lúcido... Tú sabes, el aburrimiento, el tedio. Bebo cuando no estoy en lo que me gusta...

¿Qué te gusta?
Leer. Leo por leer. Leo de todo. Tú que eres periodista debes saber lo que dijo MacLuhan: el mensaje es el medio. Me dio rabia descubrir eso... Me carga ese gallo. Me di cuenta que leo por leer, que la motivación no está en el contenido, sino en la mecánica de leer... Veo películas viejas cuando veo televisión. Me interesan para reconstruir cosas, recuerdos. Me gusta mirar para atrás, pero eso no quiere decir que no me guste el progreso.

¿Te interesa la magia?
Como forma literaria. Tienen la misma raíz la magia y la poesía. Creo que algunos poetas pactaron con la naturaleza. Hicieron conjuros. Todos los pueblos tienen un poeta; es práctico. Entre los esquimales saben encantamientos para cazar focas; saben hacer llover entre los mapuches. Saben pactar con los elementos naturales. Saben, como Orfeo, domar a las fieras con el canto.

¿Y cuál es tu poder como poeta?
Domar a las fieras. Conjurar a los poderes del mal...

¿Pero tienes miedo? ¿De qué más tienes miedo?
El siglo veinte. Siglo de los slogans. Me da miedo el miedo de la gente. No les gusta pensar. Uno es rebelde sin darse cuenta, no acepta valores establecidos. Me gusta el dinero, pero me puedo pasar sin él; he aprendido a prescindir...

¿Y qué sientes ahora, después de –haber ganado- los Juegos Florales?
Es molesto ser poeta laureado. La empleada, cuando supo, me llevó un cartapacio de poemas de su marido, un ex-carabinero. Antes, ni me cotizaba.

Cuéntame algo del poeta...
Soy antiaventurero. Mis viajes son sólo imaginarios. Por eso creo que no me interesan los viajes espaciales... Prefiero soñar y anoto algunos sueños. Sueño poemas.

¿Qué sueñas? Cuéntame algún sueño.
Sueno con la vuelta a un pueblo, que a veces es Lautaro, pero no estoy seguro. Una vez soné que llegaba en verano. Estaban mis parientes y encendían el fuego en la chimenea. Yo subía al segundo piso y allí estaba una niña muy linda que era como para mí. De pronto se ponía vieja, como en Shangri-La, y era porque mis parientes dejaban de atizar el fuego... Así, soné un poema. Lo soné entero y lo mandé a Paula. En realidad mandé cuatro poemas. La gente no quiere soñar, la autocensura, por eso no lee poesía...

¿EI trago te ayuda a soñar?
Bueno, borra cierta inhibición, pero siempre es dañino.

Te habrá acarreado muchos problemas, sobre todo con tus mujeres.
Las mujeres siempre tienen conflictos. La del pueblo es más sabia, sabe que el que bebe va a llegar a la casa. Claro que a veces se extralimita y le pega, pero ésa es una muestra de amor del marido que no tiene lenguaje... El chileno no tiene lenguaje. Nos falta expresarnos, somos pobres de expresión. Cuando decimos “tropicalismo” les tenemos envidia a los tropicales. Ellos son mucho más sanos. La mujer humilde ve al hombre que bebe como un niño que anda con sus amigotes. Las más civilizadas o intelectuales creen que pueden cambiarlo. Se aprobleman.

¿Y qué mujer sería la adecuada?
Francis Jammes repitió algo que dijo Baudelaire y que yo pienso ahora: la mujer que convive con el poeta debe ser adolescente o prostituta. Son menos conflictivas. Claro que si pones eso mi mujer va a decir que soy un inmaduro...

¿Cómo es tu mujer?
Mi mujer es sensible y encantadora. Ella es estimulante.

¿Qué edad tienes?
41 años. Mi cumpleaños lo celebré quebrándome la nariz.

¿Por qué dices que las intelectuales son conflictivas?
La mujer madura y realizada es conflictiva porque tiene su mundo propio y quiere incorporarte. Uno está entregado al prójimo y éste es algo abstracto. ¿Sabes? No me gustaría que mi hija estuviera casada con un poeta de verdad.

¿Cuáles son los poetas de verdad para ti?
Góngora, Eliseo Diego (se parece a mí en versión mejorada), Baudelaire, Dylan Thomas. A veces leo traducciones y eso me hace sospechar. Pero también leo poetas en alemán aunque no entiendo nada. Puedo sentirlos e invento poemas sobre ellos. Tengo afinidad con los nórdicos. Es el sur que pesa...

Dijiste que tenías miedo del siglo XX.
Nos apoderamos de las cosas y después las cosas se apoderan de uno. Yo no quiero tener cosas. Quiero vivir en el siglo XIX en algunos aspectos.

¿También le temes al dentista?
No. Soy dejado, como buen chileno. Mi parte francesa me lo reprocha mucho...

Háblame de tu mundo afectivo.
Me da miedo la falta de disponibilidad de uno mismo en la pareja. Yo soy muy egoísta, mezquino. No me gusta pedir y no me gusta dar nada. Soy poco afectivo, poco efusivo. No me gusta prestar libros. No presto cosas. Sólo quiero relacionarme de paso no más con la gente.

¿Qué haces en un día cualquiera habitualmente?
Escribo cartas a mi familia. Le escribo a un rumano que admira a Teófilo Cid, a quien le debo el Premio Paula.

¿Por qué a él?
Hice una manda (no la puedo decir). Sólo que en homenaje a Teófilo Cid.

Háblame de él.
Fundador del surrealismo chileno, grupo Mandrágora. Un «dandy» de la miseria. Un tipo que se autoinmoló.

¿Por qué te encomendaste a un poeta?
Algo harán por uno los poetas en el paraíso. Se preocuparán de lo que les preocupaba en la Tierra. A lo mejor hacen concursos.

A los miedosos suele gustarnos el humor. ¿Te interesa?
Leo mucho humor. Me gusta cuando muestra el lado verdadero de las cosas. El humorista es un hombre que se atreve a algo. Un rebelde valiente. Me gustan los actos de humor.

¿Cuál es un acto de humor?
Anunciar que uno se va a suicidar y hacerlo.

¿Eres un suicida latente?
Soy un suicida latente como toda persona respetable. Los patanes no se suicidan ni son alcohólicos...

Supongo que hay algo a lo que no le temes...
No le tengo miedo a la muerte. EI temor a la muerte es señal de buena salud. Quiero creer en la inmortalidad, pero no me la imagino. Por eso no soy un gran poeta: me falta la capacidad de visión, de revelación.




Santiago, 1976
en Jorge Teillier: Entrevistas (1962-1996)






2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya lo dice la Traverso...Es notable (y preocupante) el rumbo que toman las entrevistas hechas a don Jorge. Se impone la farandulilla por sacar datos curiosos sobre el poeta "alcohólico" y se deja de criticar de manera seria y profesional su obra poética.

También es cierto que el anecdotario del que se valen ciertas entrevistas tiene bastantes elementos poéticos. Pero la entrevistadora pudo ir más lejos, creo yo.. Y los críticos pueden ir más lejos...porque Teillier no es sólo lares, alcohol y Sur.

Salud y (me sumo al) larga vida a Dscntxt!

Anónimo dijo...

Teillier es sólo lares, alcohol y sur.