* Hay personas que creen que hacer antologías es hacer obra literaria. Error. Una antología no es una creación; es un préstamo que se toma a muchas personas, muchas de las cuales, por estar muertas, no pueden negarse. Las vivas no se niegan por timidez o vanidad. El antólogo aprovecha estas debilidades y aquellas defunciones.
* Esos préstamos no rinden interés alguno. Tampoco se pagan.
* Sólo los profesores y los diletantes hacen antologías; los primeros, sinceramente, para venderlas; los segundos, por amor la literatura, aunque también las venden.
* Los antólogos no pagan derechos a nadie. No se olvidan, sin embargo, de cobrar los suyos.
* Los escritores, si son buenos, subsisten; los antólogos, por buenos que sean, mueren. Sólo los pésimos sobreviven; las maldiciones los mantienen. Es necesario elegir.
* Los antólogos creen que las antologías benefician a la literatura. No hay tal. Sólo le agregan fechas inexactas, erratas a granel y una iconografía digna de la Sección de Investigaciones.
* ¿Qué van a decir mis admiradoras cuando vean este retrato mío?
* Hay poetas que sólo existen en las antologías.
* Si no fuera por los antólogos, la lírica de todos los países sería, seguramente, más escasa, pero, indudablemente, mejor.
* Pero, ¿qué haría un antólogo en un país en que no hubiera sino media docena de buenos poetas?
* En Estados Unidos se publican decenas de antologías de escritores hispanoamericanos. ¿Para qué decir que en la mayoría de los casos esos escritores no ven jamás un céntimo y que rarísimas veces reciben un ejemplar de esas antologías? La Política de Buena Vecindad exige ciertos sacrificios. . . de parte de los escritores.
* Carta a un antólogo: “Señor: gracias a usted, la humanidad dispondrá, desde la fecha de la aparición de su antología, de dos versiones de mi poema Gato encerrado: la que yo tuve la insensatez de escribir y la que usted ha tenido la osadía de atribuirme”.
* Final de la carta: “...y, gracias a usted, que me hace nacer en 1876, siendo que en realidad sólo nací en 1896, tendré que estirar la pata antes de tiempo”.
* Esos préstamos no rinden interés alguno. Tampoco se pagan.
* Sólo los profesores y los diletantes hacen antologías; los primeros, sinceramente, para venderlas; los segundos, por amor la literatura, aunque también las venden.
* Los antólogos no pagan derechos a nadie. No se olvidan, sin embargo, de cobrar los suyos.
* Los escritores, si son buenos, subsisten; los antólogos, por buenos que sean, mueren. Sólo los pésimos sobreviven; las maldiciones los mantienen. Es necesario elegir.
* Los antólogos creen que las antologías benefician a la literatura. No hay tal. Sólo le agregan fechas inexactas, erratas a granel y una iconografía digna de la Sección de Investigaciones.
* ¿Qué van a decir mis admiradoras cuando vean este retrato mío?
* Hay poetas que sólo existen en las antologías.
* Si no fuera por los antólogos, la lírica de todos los países sería, seguramente, más escasa, pero, indudablemente, mejor.
* Pero, ¿qué haría un antólogo en un país en que no hubiera sino media docena de buenos poetas?
* En Estados Unidos se publican decenas de antologías de escritores hispanoamericanos. ¿Para qué decir que en la mayoría de los casos esos escritores no ven jamás un céntimo y que rarísimas veces reciben un ejemplar de esas antologías? La Política de Buena Vecindad exige ciertos sacrificios. . . de parte de los escritores.
* Carta a un antólogo: “Señor: gracias a usted, la humanidad dispondrá, desde la fecha de la aparición de su antología, de dos versiones de mi poema Gato encerrado: la que yo tuve la insensatez de escribir y la que usted ha tenido la osadía de atribuirme”.
* Final de la carta: “...y, gracias a usted, que me hace nacer en 1876, siendo que en realidad sólo nací en 1896, tendré que estirar la pata antes de tiempo”.
6 comentarios:
Manuel Rojas habrá tenido sus razones como escritor, para referirse a los antólogos y a la antología con tales palabras.
Si las obras, los fragmentos, presentados en una antología son en calidad de "flores escogidas" (como dice el origen de su palabra), bien recibidas debieran ser, como lector. Sobre todo en un lugar donde la población desconoce bastante a sus escritores, donde la cultura no incluye preferentemente a la literatura. Quizá sea un buen inicio para que luego los lectores puedan decidirse (y se incentiven) a leer a algún escritor en particular.
Cabe decir que los lectores "de la generación del 27" ciertamente eran muy distintos a los de hoy: la disponibilidad de la literatura para con el lector común y corriente era mayor.
Proponemos, entonces, libros (más) baratos (en su confección material, si fuese necesario), bibliotecas abiertas día y noche, campañas de libros libres, etc. si en algún caso al lector le afectan las antologías.
Un escritor (de libros de litaratura)podrá decirnos algo al respecto, espero...
Saludos
Comunidad Viabinaria
Siguiendo una invitación vine hasta aquí ¿y qué puedo decir? que de momento me gusta lo que leí.
Recién, gracias a este post, conozco algo de Manuel Rojas. Gracias
hola no se q onda pero claro q me quiero inscribir en lo q sea...xao
me visitas denuevo para saber de q se trata??? ya ahora si...xao!!!
Me gustó el hecho de "criticar" a los "antólogos en un Blog que hace algo así como una antología...
NAda mejor que reirse de nosotros/as mismas/os...
Desde el atardecer caluroso y primaveral de BA,
anais i.
me he dado un gustazo leyendo este blog, sencillamente me encanto, les coloque un link en mi blog para visitarles a cada rato... Exitos y besos...
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