jueves, enero 25, 2024

«Toque de queda», de Ibtisam Barakat

Traducción de Juan Carlos Villavicencio





Nuestra ciudad es una celda.
Los rostros de los niños
Son reemplazados
Por macetas en
Los alféizares de las ventanas.
Y estamos esperando
Desde los barrotes
De nuestro aburrimiento
Entramos
En una competencia de escupos
Aquel cuyo escupitajo
Llegue más lejos
Es más libre.
Miramos al cielo
Y a nuestras preguntas de reojo
Convertimos el sol
En un volantín
Lo sujetamos con un rayo
Hasta que se rompe
En el horizonte.
Y la luz se
Despega de la tierra
En la página de un cuento 
Que no entendemos antes de dormir.
Nuestras preguntas siguen siendo
Una levadura
Dentro de nuestros pechos,
Que no paran de crecer.


en Poets for Palestine, 2008













Curfew

Our city is a cell / Children's faces / Are replacing / Flower pots on / Window sills. / And we are waiting / From our bars / Of boredom / We enter / A spit race / The one whose spit / Reaches farther / Is freer. / We look to the sky / Squint our questions / We turn the sun / Into a kite / Hold it with a ray / Till it is torn up / Inside the horizon. / And the light is / Peeled off the ground / A page in a bedtime story / We do not understand. / Our questions remain / A yeast / Inside our chests, / Rising.








 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario