Es en las escarpadas colinas –y tal vez en un claro de luna–
que acompaño el ganado (la figura
de las palabras) del que a veces soy dueño
y soy pastor.
Bien junto a él, y vislumbrando en la distancia
ruinas y caminos, huertos y matorrales
(y hasta un cuerpo en llamas de guitarra),
reencuentro el hilo de frases y poemas
–sus corrales.
que acompaño el ganado (la figura
de las palabras) del que a veces soy dueño
y soy pastor.
Bien junto a él, y vislumbrando en la distancia
ruinas y caminos, huertos y matorrales
(y hasta un cuerpo en llamas de guitarra),
reencuentro el hilo de frases y poemas
–sus corrales.
Pastoreio
É em íngremes serranias –e talvez ao luar–/ que acompanho o gado (o vulto/ das palavras) de que às vezes sou dono/ e sou pastor.// Bem junto a ele, e vislumbrando ao longe/ ruínas e caminhos, hortejos e silvedos/ (e mesmo um corpo em chamas de guitarra),/ reencontro o fio das frases e os poemas/ –seus currais. //
É em íngremes serranias –e talvez ao luar–/ que acompanho o gado (o vulto/ das palavras) de que às vezes sou dono/ e sou pastor.// Bem junto a ele, e vislumbrando ao longe/ ruínas e caminhos, hortejos e silvedos/ (e mesmo um corpo em chamas de guitarra),/ reencontro o fio das frases e os poemas/ –seus currais. //
No hay comentarios.:
Publicar un comentario