viernes, mayo 22, 2015

"Pon en mi pecho, niña, pon tu mano...", de Heinrich Heine





Pon en mi pecho, niña, pon tu mano.
¿No sientes dentro lúgubre inquietud?
Es que en el alma llevo un artesano
que se pasa clavando mi ataúd.

Trabaja sin descanso todo el día;
y en la noche trabaja sin cesar;
que acabes pronto, maestro, mi alma ansía,
y me dejes en calma descansar.




Versión de Vicente Huidobro














No hay comentarios.: