miércoles, marzo 16, 2011

“El compromiso”, de Friedrich Dürrenmatt

Fragmento





En todas las historias de misterio otro tipo de fraude es perpetrado. No me refiero al hecho de que el criminal tiene su castigo predeterminado. Los cuentos de hadas son moralmente necesarios, supongo. Están en la misma línea que otras mentiras que ayudan a preservar el Estado, como la piadosa frase que el crimen no paga, cuando uno solamente tiene que mirar a la sociedad para encontrar cuanta verdad existe en eso... No, lo que realmente me molesta es el argumento. Aquí el fraude se vuelve demasiado crudo y sin vergüenza. Construyes tus argumentos lógicamente, como un juego de ajedrez; aquí el criminal, aquí la victima, aquí el cómplice, aquí la mente maestra. El detective sólo necesita saber las reglas y jugar la partida de nuevo, y tiene al criminal atrapado, ha ganado una victoria para la justicia. Esta ficción es frustrante. La realidad puede ser sólo parcialmente atacada por la lógica.




1958














No hay comentarios.: